Trouble is a friend

Bueno, de verdad mi intención era venir más seguido por acá. Esta semana ha sido realmente infernal para mí: el trabajo me consume como nunca. A tal punto de tener que llegar a mi casa a invertir horas en trabajo que estoy seguro no me pagarán. He estado pendiente de escribir pero no había podido, hasta ahora, sentarme tranquilamente a escribir una entrada.

Esto de haberse dado cuenta de tu vocación luego de tantos años, está trayendo sus consecuencias. A veces pienso realmente que tengo vocación para CUALQUIER trabajo, menos para el que me formé. Mi sueño es ser mi propio jefe y de trabajar cuando quiera y como quiera. Supongo que ese el sueño de todo el mundo. Gracias a dios tengo ensayos de baile y ensayos de teatro.

 

De nuevo comencé a escribir libretos. Me encanta cuando las ideas llegan solas. Vamos a ver cómo terminan. He tenido muchísimas cosas que escribir pero se me ha hecho difícil. Luego del 15 de febrero toda la carga de trabajo habrá bajado a su mínima expresión. O al menos, eso espero.

¡Conste que aquí estoy! No pienso abandonar este lugar tan a la ligera.

Atte.

El hermano de mi hermana.